

La famosa esponja natural de raíz de Konjac, la planta procedente de indochina y usada durante más de 1500 años en Corea y Japón para tratamientos de belleza. Una vez humedecida adquiere una textura y un tacto espectacular excelente para exfoliar la piel. El uso tradicional original emplea esponjas de konjac, arcillas y un poco de carbón puro de bambú para absorber las toxinas de la piel. La esponja konjac también puede combinarse con aceites limpiadores faciales. Ideal para usar con nuestros hidrolatos, hidrotónicos y aguas florales. Recomendadas por centros de estética, bronceado, balnearios, peluquerías, pequeños profesionales y uso personal.
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