¿Te está costando más de la cuenta?
¡Bienvenidos de nuevo al blog de Essenciales! ¿Cómo van esos cuerpos? ¿Os estáis acostumbrando a la vuelta a la rutina?
Como ya comentamos en el post anterior septiembre significa comienzos y la vuelta a la rutina pero puede que a nuestro cuerpo y a nuestra mente les este costando volver de las vacaciones más de lo que tú piensas. Esto tiene una buena explicación, y es por el llamado síndrome post-vacacional. Lo podemos notar en el cuerpo al sentirnos fatigados y cansados constantemente, dolores musculares o falta de sueño; y psicológicamente podemos estar más irritables, nerviosos o tristes. Y es completamente normal, estábamos de vacaciones y nos gustaba estarlo y por mucho que te guste tu trabajo o tus estudios volver a ellos es una faena…
Además si comienzas algo que es nuevo para ti entrará en juego el factor del miedo y la incertidumbre, lo cual puede empeorar mucho más tu estado de ánimo y hacer que te cueste un poco más este inicio.
También hay muchos casos en los que esta vuelta a la rutina es una vuelta al estrés , el tráfico congestionado, el trabajo que se acumula, los profesores ya fechando trabajos y exámenes, etc; si a esto le sumamos el hecho de que nos cuesta más concentrarnos puesto que nuestra mente se encuentra en un periódo de adaptación, la vuelta a la rutina se convierte en una cuesta muy empinada que debes subir con una pedazo de mochila con todos tus nervios, incertidumbres, irascibilidad, etc.
Pero no os preocupéis: desde el laboratorio Essenciales tenemos algunos consejos para llevar mejor la vuelta a la rutina además de, por supuesto, algunos aceites esenciales que os ayudarán en este proceso.
Algunos consejos para acabar de superar la reincorporación en septiembre:

Sírvete de los aceites esenciales para que no te intimiden los obstáculos
- Fijarse metas: puede parecer más estresante pero en realidad no lo es. Fijarse una meta diaria, una semanal y una mensual ayuda a tener unos objetivos propios que quieres cumplir y con los que te sentirás satisfecho al alcanzar.
Por ejemplo: un objetivo diario debe ser algo que al levantarte por la mañana quieras hacer: leer 3 capítulos del libro que estás leyendo.
Semanal: ordenar por fin toda esa ropa que tienes revuelta de haber vuelto de las vacaciones.
Mensual: poner el trabajo al día. - Ser organizado: parecerá tontería pero tener una agenda, un calendario o un planificador semanal o mensual, ayuda mucho a tenerlo todo en orden , si tienes tu planificador semanal en la pared y vas apuntando todo lo que debes y quieres hacer esa semana, además de las citas o salidas con amigos; te ayudará a saber cómo va la semana y que huecos libres tienes y cuándo tienes alguna entrega importante. Al tenerlo todo delante, de una forma visual te ayuda a ordenar también tu cabeza y a establecer prioridades.
- Hacer deporte: siempre se dice horas de sueño+buena dieta+ejercicio= vida ideal; no sé si ideal o no, pero de lo que estoy segura es de que el deporte ayuda a la salud, y mucho. No hace falta matarse en el gimnasio o hacer 14 kilómetros en bici; basta con dar un paseo de 30 minutos desconectando los datos del teléfono y fijándote en lo que te rodea: la gente, las calles, el paisaje… de esta manera desconectas, por un rato lo dejas todo a un lado y disfrutas de lo que estás haciendo, de cómo el sol te va dando en la cara y de lo tranquilo que te sientes. Esto es como resetear el cerebro, lo ideal sería hacerlo antes de entrar al trabajo y al terminar todas tus obligaciones del día, porque te ayuda a cargar tus pilas emocionales y a que tu cerebro descanse.
Y por último pero no menos importante…
- Dedicar tiempo al ocio: Sí, está muy bien aprovechar el tiempo y ser productivo pero no todo debe girar en torno a ello; necesitas tiempo para hacer lo que tú quieras hacer: ya sea salir a tomar algo con amigos, ver una serie o película, o jugar a la wii; no importa, lo importante eres tú. Y por ello debes cuidarte, y una de las formas de hacerlo psicológicamente es así y necesitas este rato para ti a diario. Organizándote lo encontrarás.
Aceites esenciales que ayudan a la memoria, concentración y a combatir los miedos y el estrés.
Remedio de aromaterapia para los miedos
Debemos hacer una sinergia en un bote con roll-on o con cuenta gotas de:
- Aceite esencial de azahar (5 gotas)
- Aceite esencial de incienso (3 gotas)
- Aceite esencial de absoluto de rosa búlgara (5 gotas) opcional.
- Aceite esencial de laurel (5 gotas)
- Aceite esencial de baya de enebro (6 gotas)
- Botella topacio de 30 ml.
Y complementar con algún aceite vegetal/portador como el de coco, aguacate, aceite de argán o jojoba.
La podéis aplicar en muñecas y cuello o también usarlo en un difusor en casa.
Aceites esenciales que mejoran la concentración
- Aceite esencial de romero cineol – Útil cuando se añade a un difusor atomizador. Estimulante aromático.
- Aceite esencial de lavanda – Un equilibrador de energía. Masajear sobre las sienes diluidas con Aceite de Almendras Dulces.
- Aceite esencial de eucalipto Radiata -Estimulante y tonificante, el aceite esencial de eucalipto ayuda a mejorar la concentración.
- Aceite esencial de menta piperita – El aceite esencial de menta puede mezclarse fácilmente con otros aceites, como la naranja. Es conocido por sus propiedades estimulantes.
Sinergia para mejorar la memoria y estimular la concentración:
Diluye el aceite esencial de romero cineol, el aceite esencial de lavanda, el aceite esencial de eucalipto radiata o el aceite esencial de menta piperita utilizar dos gotas de cada uno de los aceites esenciales, mezclar con un aceite vegetal ( a elegir al gusto, por ejemplo almendra).
Una vez hecha la mezcla: masajear la frente y la nuca.
Sinergia para combatir la mala memoria:
Utilizar en una lámpara de aroma o difusor, baño o masaje de uno de estos aceites esenciales:
Mezcla de aceites esenciales estimular la buena memoria:
Combinar los aceites esenciales puros de romero, petitgrain, enebro, jengibre, clavo y albahaca, que son conocidos por estimular la mente y la memoria.*
Puedes probar esta mezcla de aceites esenciales para la memoria en spray y en difusor.
Y por último…
Dos aceites esenciales que os ayudarán a combatir el estrés:
Bergamota
Con su distintivo aroma a limón, naranja amarga, balsámico. Se cree que el aceite ayuda a reducir la ansiedad, permitiéndole sentirse más relajado.
La bergamota también es antibacteriana y tiene propiedades calmantes, antiespasmódicas, analgésicas y antisépticas, lo que significa que es lo suficientemente versátil como para ser utilizada para una serie de beneficios para la salud física y mental.
Manzanilla romana
El aceite esencial de manzanilla es muy calmante. Favorece el equilibrio del «yo interior» y también puede ayudar a aliviar la ansiedad y la irritabilidad. Los estudios han demostrado que la manzanilla puede ayudar a los pacientes con depresión, y también puede ayudarte a dormir más rápido para tener un mejor sueño nocturno. Debido a que la manzanilla es un calmante del estrés, también puede ayudar a aliviar la ansiedad inducida por éste.
La forma más calmante para usar estos aceites y que potencie la relajación que andamos buscando es: o bien aplicar unas gotas en nuestro baño o en difusor; lo podéis usar cuando lleguéis a casa y os echéis en el sofá, el aroma llegará a vosotros y os ira calmando o también cuándo estéis en la cama para dormir.
Y con esto y un bizcocho … ¡nos vemos en el siguiente post ! Mucho ánimo con esta “cuesta” de Septiembre , que cuánto más alta mejores serán las vistas 😉
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